Spider-Man: Homecoming (el Ironman de los pobres)

Sinopsis: Peter Parker comienza a experimentar su recién descubierta identidad como el superhéroe Spider-Man. Después de la experiencia vivida con los Vengadores, Peter regresa a casa, donde vive con su tía. Bajo la atenta mirada de su mentor Tony Stark, Peter intenta mantener una vida normal como cualquier joven de su edad, pero interrumpe en su rutina diaria el nuevo villano Vulture y, con él, lo más importante de la vida de Peter comenzará a verse amenazado.

Una película con el sello distintivo de Marvel arreglando el fiasco de sus anteriores versiones no comienza con el origen de Spiderman (menos mal porque volverse a tragarse esa trillada parte por tercera vez en tan pocos años hubiera hecho que apagase el televisor). Sin embargo, pese a tener algunos momentos buenos padece de los errores comunes de esta hornada de películas de superhéroes, con sus más de dos horas hace que sea menos digerible la obvia trama que vemos y con la corrección política que hace que Flash Thompson que era un chico de gimnasio y bueno para lo deportes y aquí es un chico de origen hindú, que no aparenta una amenaza física para Peter Parker. El papel del buitre en manos de Michael Keaton fue muy acertado, además el origen de su historia estuvo muy bien estructurado. Por lo que en definitiva, se le puede dar una oportunidad.