Con el tono poco serio de esas películas francesas de acción de los 2000's nos encontramos con una película que cumple, que no se hace larga, que tiene sus esperados saltos de parkour y sus escenas de acción más o menos logradas.
Los que recuerden las maquinas de arcade de los 80 les será fácil hacerse una idea de como es la película sabiendo que es como si hubieran cogido uno de esos juegos y hubieran hecho una película. No hay un guion de libro, ni actuaciones dramáticas dignas de un oscar, pero ni falta que hace. Es un no parar de parkour y de reparto de guantazos y no se deja que el ritmo decaiga en ningún momento. Da lo que promete. Hora y media de acción bien hecha.
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