En esta ocasión Seth Garden le sirve el mismo registro que usa en todas sus películas pero sin tener que aprender a responder al nombre del personaje de turno, ya que hace de sí mismo y lo usa para parodiar sus otras interpretaciones y las de sus amigos. Hace gracia en varios momentos, no por Seth Garden, que nunca ha tenido gracia, si no por los secundarios más atinados, pero este post humor yanki de farloperos, fumetas, pedorros y bocachanclas cansa en cuanto superan los 45 minutos. La autoparodia está bien si no fuera porque estos "actores" son en sí mismos una parodia y sus habituales papeles y una repetición sobre una reiteración de lo hecho anteriormente.
Juegos retro sobre el navegador
-
En retrogames puedes jugar a varias plataformas antiguas tanto consolas
como PCs sin necesidad de instalar ni descargar nada ni pelearte con BIOS o
máqu...
0 comentarios:
Publicar un comentario