Donde la primera quiso abarcar demasiado, su secuela ha preferido centrarse en poca cosa y aún así durar sus dos horas. La realidad es que las situaciones cómicas y un doblaje penoso, te sacan de la trama, es cierto que en el anime también pasaba esto, pero con actores reales queda mucho más ridículo. Hubiera sido mejor que en vez de mimar tanto el parecido de los actores que parecer cosplayers (especialmente espantososo por lo ridículo que es Lous Armstrong) hubiesen ajustado la duración y enfocarse más en mejores momentos de acción y dramáticos que en ese fanservice de relleno.
Juegos retro sobre el navegador
-
En retrogames puedes jugar a varias plataformas antiguas tanto consolas
como PCs sin necesidad de instalar ni descargar nada ni pelearte con BIOS o
máqu...
0 comentarios:
Publicar un comentario